El presidente del Gobierno admitió ayer que la economía española crecerá este año por debajo del 2%. La Administración solo contratará a los empleados «imprescindibles». El plan de austeridad congelará el sueldo de los altos cargos del Estado, pero no el de los funcionarios ¿HASTA CUANDO?.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, presentó ayer en la sede del Consejo Económico y Social (CES) su segundo Informe Económico, correspondiente a este año, en el que, además de un diagnóstico de la convulsa situación actual, que calificó de «período de dificultades serias», realiza un pronóstico sobre su evolución, afirmando: «Estamos en mejores condiciones que otras veces para superarlas y salir fortalecidos». Zapatero también revisó a la baja la previsión de crecimiento del PIB para el 2008, que estará «por debajo del 2%», y situó el comienzo de la recuperación a finales del 2009.
En este escenario, avanzó una batería de veintiuna medidas que complementan el Plan de Estímulo Económico puesto en marcha, y que actuarán en una triple dirección: afrontar la desaceleración, fomentar la austeridad en la Administración -para mantener el equilibrio presupuestario- e impulsar cambios estructurales en la economía. Entre ellas, destacan:
Reducción de la oferta pública de empleo.
Aunque el presidente habló de un recorte de «al menos» un 30% para el próximo año, la Moncloa precisó después que la oferta de plazas sería en el 2009 el 30% de la de este año, de modo que se reduciría el 70%. Solo se mantendrá la dotación «imprescindible» para los servicios públicos esenciales, especialmente de «seguridad, justicia e inspección de trabajo».
Congelar los salarios de los altos cargos.
«Solo de los altos cargos -insistió- porque tengo el compromiso decidido de mantener los pactos suscritos con las organizaciones sindicales de la Administración». Expresó su deseo de que la medida «tenga un efecto ejemplarizante» en el resto de las Administraciones públicas. «En nuestro caso, supondrá un ahorro, entre este año y el próximo, de al menos 250 millones», dijo. Reducción del gasto corriente. El próximo Consejo de Ministros declarará no disponibles 20 millones del capítulo II (el de gastos corrientes) de los Presupuestos Generales del Estado. Además, esta partida se incrementará solo un 2% en las cuentas del 2009, es decir, «menos de la mitad del crecimiento previsto para ese ejercicio».
Financiación de pymes y viviendas de promoción pública con 35.000 millones. Anunció también la ampliación de los apoyos a la financiación de las pymes, la línea de crecimiento para empresas medianas y la de ayuda a la financiación de VPO, para que «entre el 2009 y el 2010 se movilice un volumen conjunto de 35.000 millones de euros». Plan Renove para impulsar la rehabilitación. Se centrará en la rehabilitación de viviendas e infraestructuras hoteleras, para lo que se dotarán nuevas líneas de crédito ICO por valor de 2.500 millones de euros anuales (2.000 para el plan de viviendas y 500 para el de instalaciones turísticas). Plan VIVE para vehículos. Se pondrá en marcha en julio y tendrá una dotación anual de 1.500 millones de euros. El programa financiará, a través de préstamos a tipo de interés subvencionado, a todos los ciudadanos que sustituyan su coche de más de 15 años por un vehículo nuevo de bajas emisiones. Reforma del sector del transporte. Incluye un plan para liberalizar el transporte de mercancías por ferrocarril (antes de agosto se presentará un proyecto de ley) y la entrada de capital privado y de las comunidades autónomas en la gestión de aeropuertos de AENA (el programa de reestructuración se presentará en julio). Antes de fin de año también presentarán un anteproyecto de Ley de Puertos.